El pecado de Uriel - Shelly Kengar

  

Un pecado, una condena y un enrevesado plan. Uriel Lacasta fue acusado de asesinar al amor de su vida y encarcelado.

Le arrebataron a su mujer y su libertad, quebrando su alma sin más.

Diez años y un buen trabajo por parte de sus abogados junto a una buena conducta logra que recupere su libertad.

Ahora dedicará su dinero, sus fuerzas y su voluntad para atrapar a los culpables reales de la muerte de su esposa.

Lo que no esperaba era tropezarse con una sirena con pelo de fuego y carácter endemoniado que será su vicio capital, su deseo más voraz, su castigo y su debilidad.

¿Podrá Uriel demostrar que no es un asesino?

Venganza, deseo, mentiras y mucho más…

En ocasiones los malos no son tan malos y los buenos tan buenos.

Y de repente, el mundo se paró - Elizabeth Bermúdez

 

Cuando Marcos sale en libertad, se encuentra con muchas sorpresas, entre ellas que ha heredado un club de intercambio de parejas y placeres sexuales. Nada lo detendrá hasta hacer que Sofía, la abogada que lo ha sacado de la cárcel, entre en su mundo para quedarse. Saber que es once años mayor que él y que está casada no supondrá un obstáculo para tratar de conseguir a la mujer con la que sueña todas las noches. Sofía Ortiz es una mujer tradicional, se encuentra en la etapa en la que desea ser madre, y la vida de Marcos le queda muy lejos, pese a tentarla con experiencias que nunca antes ha tenido .El mundo se ha parado en dos ocasiones para Marcos Luna: cuando entró en la cárcel con veintiún años, y permaneció siete en ella, y cuando en España se declara el Estado de alarma debido a la pandemia del Covid-19.Es entonces cuando jura que nunca más, si su vida se vuelve a paralizar, estará solo. Tiene muy claro qué desea en su día a día para siempre.

Un error muy deseable - Stephanie Bond

  

Se había casado con un guapísimo marine al que había conocido sólo unas horas antes. La noche, en realidad semana, de bodas había sido espectacular, pero después Redford había vuelto al Golfo y ella a Nueva York a continuar con su vida de economista y a solicitar la anulación matrimonial.

Ahora Denise estaba saliendo con Barry, pero seguía pensando mucho en Redford. Y gracias a una inspección de Hacienda, iba a volver a ver a su ex marido. Pero ¿por qué se ponía nerviosa? Seguramente estaría casado y no tendría ninguna intención de llevársela a la cama... Además, ella no volvería a cometer el mismo error.