—Si estás tan preocupada por mi humanidad, Elena, entonces busca en mi alma y encuéntrala, porque no estoy seguro de que me quede alguna.
Según el FBI, fui considerado un asesino en serie después de tres asesinatos.
¿Cómo me llaman después del cincuenta y dos?
Me llaman el Silenciador.
Una última bala habría sido todo lo que necesitaba para evitar que tomara otra alma, y le habría estado haciendo un servicio a Meridian City al apretar ese gatillo.
Un ángel que pedía ayuda me detuvo y esa noche tomé tres vidas por ella.
Entonces tres se convirtieron en ocho.
Luego ocho se convirtieron en veinte.
Veinte se convirtieron en veintiuno.
Veintiuno se convirtió en veintitrés.
Elena Young es la heroína de mi historia, pero yo soy el villano de la suya. Y este es el tipo de historia en la que el villano atrapa a la chica, incluso si la mata.
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