¿Conoces esa sensación de que no encajas en ninguna parte? Pues exactamente así es como yo me sentía.
A pesar de mi fama, que me viene por ser un conocido futbolista de uno de los mejores clubes europeos, nada me hacía sentir bien. El dinero, el éxito, las mujeres, todo ello formaba parte activa de mi vida, pero los consideraba algo efímero, que hoy estaban y mañana podían desaparecer.
Nadie me comprendía, todos me reían las gracias, hasta que llegó ella, que volvió mi mundo del revés.
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