"Aprenderás a amar el dolor. Yo te enseñaré".
Robada. Secuestrada. Tomada.
Me sacó de la calle, poniendo fin a mi sueño de convertirme en bailarina.
Ahora, estoy encerrada en una mansión con chicas que han corrido el mismo
destino.
Mi captor es siempre rudo, rara vez amable.
Me castiga por cada pequeño error.
Me está entrenando. Preparándome.
Poco a poco, mi cuerpo comienza a romperse. Cumplir. Doblar a su voluntad.
El tiempo corre. Mi cuerpo está aprendiendo a someterse.
Casi dejo de pelear. Casi he cedido.
Aún así, la promesa de algo más oscuro flota en el aire.
El verdadero monstruo está al acecho.
Y pronto vendrá por mí.
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