
Pero Millie era diferente. Sabía que era especial desde el
momento en que la miró.
No importaba lo que planeara, Lucas sabía que tenía que
tenerla y estaba dispuesto a hacer lo que fuera para reclamarla como suya.
Querer a su jefe vino con muchas complicaciones,
principalmente porque Millie sabía que no había razón para que un hombre como
Lucas quisiera a alguien como ella.
Precioso, inteligente y exitoso, no estaría interesado en
una chica como ella.
Pero cuando él mostró interés, Millie no trató de luchar
contra la química que tenían. Cuando se acercaba el día de San Valentín y el
restaurante estaba en pleno apogeo con todo el mundo queriendo expresar su
amor, la relación de Lucas y Millie floreció.
¿Pero qué pasaría si Lucas quisiera llevarla al siguiente
nivel?
¿Podría Millie tirar la precaución al viento y entregarse
totalmente a Lucas en nombre del amor?
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