La vida sigue adelante.
Sólo las personas que nunca han perdido a alguien que
amaban con todo su corazón pueden creer ciegamente en esas palabras.
¿Y si no quisiera seguir adelante? ¿Y si quisiera
despertarme cada mañana con ese dolor familiar en el pecho, sabiendo que nunca
la volvería a ver?
Pero la vida puede cambiar en un momento.
Lo sabía mejor que nadie... Así que, cuando no podía
quitarme de la cabeza esos hipnotizantes ojos verdes, decidí hacer algo al
respecto.
¿Sería suficiente una noche con ella, o mi corazón decidiría que por fin era hora de dejar atrás el pasado?
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