Mia, de 19 años, apenas escapa de su pasado abusivo con una cicatriz en la cara, no quiere nada más que empezar de nuevo en una gran ciudad como San Francisco. No dejará que nadie se acerque, no es que nadie quisiera hacerlo.
Pero cuando el apuesto y etéreo Darius Montclaire rescata a
Mia de la sordidez de un club nocturno, la lleva al mundo duuuuúue los
alquimistas, donde crear fuego de la nada y hacer pociones para borrar
recuerdos es algo común. La alquimia no es posible sin Azoth, una energía
sagrada que se encuentra en la sangre de las descendientes de Nicholas Flamel.
Mia tiene el Azoth más fuerte visto en siglos. Darius anhela su cuerpo, pero
cuando la asignan para ser su Azoth, aprende a codiciar su corazón. Pero Darius
tiene un secreto propio. Y el pasado de Mia no permitirá que su amor sea
posible.
Él es impecable.
Ella está rota.
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